Ésta es una de esas prendas que tengo hace mil años y nunca uso, y es que no soy muy fan de los estampados florales. Sin embargo, me pareció perfecta para unirme a la tendencia off-shoulder, que aunque no me emocionaba nada, es tan femenina y effortless, que no pude resistirme.
Creo que es de esas tendencias que al principio no te despiertan ni frío ni calor, luego te saturan (fue el uniforme de verano de las fashionistas en instagram) y al final terminan conquistándote. Personalmente creo que llegó para quedarse, al menos por un tiempo. ¿Ustedes qué opinan?