2018 puso a prueba mi paciencia, determinación y seguridad. Me enseñó a ver lo mejor en mí y en los demás. Fue un año transformador. Honestamente no he planeado un outfit especial para despedirlo; y es que, al estar lejos de casa, estas fechas me resultan emocionalmente complicadas. Así que no me verán usando en el típico sparkly dress que jamás te vuelves a poner, mucho menos algo tipo red carpet. Eso sí, siempre cumplo con la tradición venezolana de recibir el año nuevo arreglada (aunque formalmente la tradición consiste en estrenar ropa), que según mi madre deberemos mantener, y cito textualmente: “mientras estemos vivas”.
Tiendo a solucionar con una maxi skirt y algún top interesante; no tienes que pensarlo mucho y puedes reusarlo en otras ocasiones. Si estás en el Caribe o es verano en tu país, un par de strappy heels con brillo y/o faux pearls completarán el look. Pero si como yo, sólo intentas sobrevivir al frío, las botas son prácticamente innegociables. ¿Los detalles metálicos valen como toque festivo?
Estos últimos días del año en los que el transcurso de la vida normal se suspende, me dedico a cumplir pendientes y adelantar propósitos de 2019. ¿Y ustedes? Aprovechen ésta época para abrazar y dejarse abrazar. ¡Nos vemos por aquí el año que viene!
Con cariño,
Griselys
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Siempre bella y humilde, Grise! yo tampoco tendré un vestido de lentejuelas. Aún no sé que me pondré, pero ten por seguro que estaré igual de regia que tú, porque como buenas venezolanas, la tradición debe seguir! Feliz 2019!
Author
¡Feliz 2019 para ti también, Carlota! Gracias por tus comentarios y apoyo. Te mando muchos besos.